El Colegio Secundario del Instituto María Santísima de la Luz busca la Formación Integral de la personalidad de los jóvenes, en el orden espiritual, intelectual, moral, social, afectivo y motriz.
Basándonos en las cuatro Virtudes Cardinales: Prudencia, Justicia, Fortaleza y Templanza, siendo las tres primeras la denominación de nuestras Casas.
Buscamos alcanzar conocimientos significativos en las diversas áreas del saber y del hacer enmarcados en el Currículum del Pensamiento y en el Desarrollo de Habilidades Sociales.
Nuestra enseñanza se centra en las virtudes cristianas para una comprensión integral de la realidad, que los ayudará al descubrimiento y desarrollo de sus Competencias:
- En Aprender a Aprender
- En Comunicación Lingüística
- En Matemática, en las Ciencias y en la Tecnología
- Digitales
- Culturales y Artísticas
- Social y Cívica
- Autonomía e iniciativa personal.
Acompañamos el proceso de educación en la Fe, conformando una comunidad educativa entre padres, docentes y alumnos, donde el conocer y el hacer se asumen como un servicio y responsabilidad hacia todos los hombres.
El Bachillerato en Educación Física, a través de las prácticas lúdicas y deportivas, posibilitará la adquisición de un pensamiento flexible capaz de atender distintas variables, acrecentando la capacidad de gestión de los alumnos para poder actuar en contextos que requieran la efectiva resolución de situaciones problemáticas. Esto facilitará a los egresados de nuestro Instituto la continuidad de estudios superiores para incorporarse al mundo del trabajo, destacándose como personas reflexivas y pensantes, capaces de trabajar en equipo como ciudadanos comprometidos con la fe católica.
“La pedagogía de Jesús es el camino para que la comunidad educativa ayude a las nuevas
generaciones a elaborar su proyecto de vida personal y comunitario.”
- que acerca existencialmente al otro,
- que sabe adaptarse a los procesos personales (humildad y Paciencia),
- que reconoce y valora la riqueza y la experiencia de los otros,
- que manifiesta una actitud de escucha,
- que instruye,
- que educa en la libertad responsable,
- que acompaña en la definición del proyecto existencial,
- que descubre y disfruta de la multiplicidad y diversidad de talentos y carismas personales,
- que enseña con la palabra y el testimonio de vida.
(Documento “Vayan y Enseñen” – Identidad y misión de la escuela católica en el cambio de época a la luz de Aparecida)